Apnea del Sueño – Obesidad y Covid19

CIRUGÍA DE LA OBESIDAD EN SEVILLASegún una nueva investigación* las personas a las que se les ha diagnosticado apnea obstructiva del sueño podrían tener un mayor riesgo de sufrir resultados adversos del COVID-19. La conclusión se extrae de una revisión sistemática de estudios que informaron sobre resultados de pacientes con COVID-19 que también fueron diagnosticados con apnea obstructiva del sueño. El estudio, ‘Una revisión sistemática del COVID-19 y la apnea obstructiva del sueño’, publicado en la revista Sleep Medicine Reviews, destaca la necesidad de investigar más a fondo el impacto del virus en las personas con la enfermedad del sueño.

La apnea obstructiva del sueño es una afección caracterizada por el bloqueo total o parcial de las vías respiratorias durante el sueño cuando los músculos se debilitan. Se diagnostica comúnmente en personas que roncan o parecen dejar de respirar o emiten sonidos de ahogo durante el sueño, y las personas que tienen obesidad en particular tienen más probabilidades de experimentarla. En nuestro blog ya hemos publicado con anterioridad algunos artículos sobre la relación entre obesidad y la enfermedad de apnea del sueño.

Asimismo, muchos de los factores de riesgo y comorbilidades asociados con la apnea del sueño, como la diabetes, la obesidad y la hipertensión, son similares a los asociados con resultados deficientes del COVID-19. Sin embargo, los investigadores querían investigar si el diagnóstico de apnea obstructiva del sueño confería un riesgo adicional además de esos factores que de por sí ya se ha demostrado influyen en una peor evolución de la enfermedad por COVID19.

De este modo,  revisión sistemática analizó dieciocho estudios con respecto a la apnea obstructiva del sueño y COVID-19, de éstos ocho estaban relacionados principalmente con el riesgo de muerte por COVID-19 y diez estaban relacionados con el diagnóstico, tratamiento y manejo de la apnea del sueño. . Aunque en ese momento se habían realizado pocos estudios de apnea obstructiva del sueño en COVID-19, existe evidencia que sugiere que muchos pacientes que se presentaron a cuidados intensivos tenían apnea obstructiva del sueño y en pacientes diabéticos puede conferir un mayor riesgo que es independiente de otros factores de riesgo. En un gran estudio en pacientes que tenían diabetes, que fueron hospitalizados por COVID-19, los que estaban siendo tratados por apnea obstructiva del sueño tenían un riesgo 2,8 veces mayor de morir al séptimo día después de la admisión al hospital.

Con las tasas de obesidad y otros factores de riesgo relacionados en aumento, los investigadores también creen que las tasas de apnea obstructiva del sueño también están aumentando. La revisión destaca que la pandemia también ha tenido efectos en todo el mundo sobre el diagnóstico, el manejo y el tratamiento en curso de los pacientes con esta y otras afecciones del sueño. En el futuro, puede ser necesario explorar nuevas vías de diagnóstico y tratamiento para estas personas.

Los investigadores creen que es importante que las personas diagnosticadas con apnea obstructiva del sueño sean conscientes del riesgo adicional potencial y tomen las precauciones adecuadas para reducir su exposición al virus. Se requiere más investigación para determinar si estas personas deben agregarse a la lista de grupos vulnerables que pueden necesitar protección si aumenta la transmisión del virus.

Por último cabe recordar que la obesidad es el principal factor de riesgo de la enfermedad de apnea del sueño. Esa relación también se demuestra a la inversa y uno de los principales beneficios de la pérdida de peso tras una intervención de cirugía de la obesidad es la mejora de la apnea del sueño.