Ejercicio físico y cirugía de la obesidad

La actividad física forma parte del conjunto de cambios al que debe enfrentarse una persona que decide tratar un problema de obesidad.

Por actividad física se entiende cualquier movimiento corporal que suponga un consumo de energía.

Todas las actividades cotidianas suponen un gasto energético (vestirse, ir a trabajar, etc..) pero se trata de un «ejercicio pasivo».

cirugía de la obesidad

La actividad física conjuntamente con el cambio de hábitos alimenticios no sólo tienen un efecto directo sobre la calidad de vida sino que además mejorará los resultados de la cirugía de la obesidad.

De este modo, el realizar un mínimo de 30 minutos diarios de actividad física de intensidad moderada al menos cinco días a la semana, es condición clave para mantener los resultados de pérdida de peso de la reducción de estómago y mejorar el estado general de salud tanto desde el puntos de vista físico como psicológico.

Para muchos pacientes el empezar a practicar alguna actividad física es prácticamente imposible porque parten de una situación de obesidad que les hace sentirse desmotivados y que hace que se sientan agotados fácilmente. Sin embargo todo cambio después de la cirugía de la obesidad. El haber perdido peso ayuda a que todo se vea diferente y el inicio de la práctica de ejercicio físico es habitual (además de necesaria) en la mayoría de personas operadas de obesidad.

¿Qué tipo de ejercicio practicar después de una reducción de estómago?

Cuando haya transcurrido el tiempo necesario, el especialista en cirugía de la obesidad determinará cuál es el momento a partir del cual puede iniciarse la práctica de ejercicio.

Con respecto al tipo de ejercicio lo más recomendable es:

1).- Caminar a un ritmo rápido: Es la actividad más apropiada, la más fácil de realizar, la que menos sensación de fatiga proporciona y la que supone un menor estrés para el corazón y el aparato locomotor. Si se opta por caminar lo más importante es tener una rutina diaria e ir incrementado la distancia y velocidad paulatinamente.

2).- Nadar: Es un ejercicio ideal para mejorar la capacidad cardiorespiratoria y además ayuda a mejorar las dolencias que la sobre carga de peso haya podido ocasionar en el cuerpo.Si la natación no convence actividades como el aquagym pueden hacer más amena la práctica de ejercicio en el agua.

practicar deporte después de cirugía de la obesidad

3).-Bicicleta estática: Se trata de una actividad que requiere poco esfuerzo en comparación con otras y por tanto puede llevarse a cabo durante más tiempo. Además tiene beneficios circulatorios.

En cualquier caso la práctica deportiva está recomendada y forma parte de cualquier tratamiento destinado a combatir la obesidad, una enfermedad que no olvidemos, es crónica.

Para más información sobre técnicas de reducción de estómago, el antes y el después de una cirugía de la obesidad, etc.. no dudes en contactar con el Dr. Barranco.

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