Si de lo que se trata es de combatir una enfermedad como la obesidad, la cirugía de la obesidad es el tratamiento más efectivo para bajar de peso y para mantenerlo posteriormente de por vida comparándolo con los tratamientos no quirúrgicos, entre los que incluimos dietas, ejercicio, fármacos, balón intragástrico, endobarrier y POSE.
Respecto al balón intragástrico, el endobarrier y el POSE, ninguna de ellas se considera cirugía pero sí son técnicas invasivas, ya que el material utilizado es introducido por la boca y aunque son técnicas poco agresivas, también pueden tener complicaciones. El balón intragástrico es muy útil en la bajada de peso previo a la cirugía, pero no como tratamiento único.
Las otras dos técnicas (endobarrier y POSE) son técnicas recientes con escasa experiencia y con una mínima pérdida de peso a largo plazo.
Si bien sobre con el BALÓN INTRAGÁSTRICO hay una gran experiencia médica publicada, sabiéndose que tiene buenos resultados los seis primeros meses pero tras la retirada del balón, la gran mayoría de los pacientes recuperan el peso perdido. A los dos años, sólo 5 de cada 100 pacientes mantienen el peso perdido.
En los pacientes extremadamente obesos con índices de masa corporal por encima de 55 kg /m2, el balón intragástrico es utilizado para bajar de peso antes de la cirugía. Esta bajada de peso justo antes de la cirugía va a disminuir de manera muy importante la posibilidad de tener complicaciones tanto las relacionadas con la cirugía de la obesidad (hemorragia, hernia, peritonitis por fuga de las uniones operatorias…) como complicaciones generales (infarto, neumonía, trombosis venosa profunda, problemas del riñón, hígado…).
El ENDOBARRIER, es otro dispositivo médico no quirúrgico introducido por la boca. Es un revestimiento interno gastrointestinal de unos 60 cm con forma de tubo, como una prótesis expandible o funda de plástico, delgada y flexible con un anclaje metálico en su extremo final que se fija al estómago para intentar que no se deslice por el intestino. El endobarrier forma una barrera física entre los alimentos y la pared interna del intestino, de esta manera los alimentos pasarán por el interior del tubo de plástico y por fuera pasarán tanto la bilis como las enzimas pancreáticas, mezclándose al final del tubo de plástico.
La duración del tratamiento suele ser de 12 meses y las complicaciones más frecuentes son las náuseas, vómitos y dolor abdominal. Otros riesgos menos frecuentes descritos en las publicaciones médicas incluyen infección, traumatismo y sangrado, obstrucción de la prótesis, migración del anclaje y posibilidad de perforación, tanto en el periodo de tratamiento como durante la maniobra de extracción.
El endobarrier al igual que el balón intragástrico son métodos eficaces durante el tiempo que están implantados en el estómago e intestino, pero tras su retirada la gran mayoría de los pacientes vuelven a reganar el peso perdido y además son métodos invasivos no exentos de complicaciones. Son necesarios estudios médicos serios con un gran número de pacientes y seguimientos a largo plazo, para determinar la eficacia del ENDOBARRIER.
POSE, son las siglas en ingles de Cirugía Primaria Endoscópica de la Obesidad, es una técnica invasiva endoscópica que a nivel del estómago se realizan suturas permanentes o no, para fruncir o plicar el estómago, siendo necesario para ello unas 7-12 suturas. La idea es reducir el tamaño y limitar la capacidad del estómago produciendo sensación de saciedad precoz. Es una nueva técnica casi en experimentación que parece ser relativamente sencilla pero como toda técnica invasiva con posibles complicaciones, en este caso relacionadas sobre todo con los puntos de sutura.
La realidad es que el POSE consigue una reducción del estómago, pero casi inapreciable si comparamos las radiografías con contraste oral realizadas antes y después de fruncir con suturas el estómago. La bajada de peso de los pacientes sometidos a esta técnica probablemente no es por la reducción del estómago si no por el buen control dietético, ejercicio y seguimiento estrictos por parte de los profesionales médicos durante los primeros meses.
Si tienes más dudas sobre por qué deberías valorar la cirugía de la obesidad en lugar de otras técnicas, no dudes en contactarme.