Las nuevas indicaciones de cirugía de la obesidad permitirán que más personas sean candidatas para solucionar su problema de sobrepeso con estas técnicas.
· Pacientes con un índice de masa corporal (IMC) de 30 a 35 kg/m2 que no logren una pérdida de peso suficiente o una mejora sostenida en sus problemas de salud después de tratamientos no quirúrgicos pueden ser candidatos a la cirugía.
· Estos cambios representan un avance significativo según las sociedades científicas, ya que permite que pacientes con obesidad menor se beneficien de la cirugía.
Estudios a largo plazo publicados en las décadas posteriores al Consenso del NIH de 1991 han demostrado de manera consistente que la cirugía bariátrica logra una pérdida de peso mayor que los tratamientos no quirúrgicos, como medicamentos, balón gástrico o técnicas de reducción de estómago sin cirugía (Endomanga, POSE, entre otros). Asimismo, son muchas las investigaciones que concluyen que existe una mejoría significativa en las condiciones metabólicas (hipertensión arterial, diabetes, colesterol, triglicéridos, apnea del sueño), de las personas que se someten a una intervención de cirugía de la obesidad.
Ambos hechos, unidos a los datos que demuestran la seguridad de este tipo de procedimientos, han facilitado que la cirugía de la obesidad haya llegado a convertirse en uno de los tratamientos más comunes en cirugía general.
Cambios en las indicaciones de cirugía de la obesidad:
Hasta la fecha, los criterios para considerar la cirugía bariátrica que se han aplicado universalmente, son un índice de masa corporal (IMC) igual o superior a 40 kg/m2, o un IMC igual o superior a 35 Kg/m2 con comorbilidades. En vista de los avances significativos en el conocimiento sobre la obesidad y su manejo, así como en la cirugía bariátrica, en 2022, los líderes de la American Society for Metabolic and Bariatric Surgery (ASMBS) y la International Federation for the Surgery of Obesity and Metabolic Disorders (IFSO) se reunieron para elaborar un documento de consenso sobre la información científica actualmente disponible acerca de la cirugía bariátrica y metabólica, del cual se resumen los siguientes puntos:
· Los resultados a largo plazo demuestran de manera consistente la seguridad, eficacia y durabilidad de la cirugía en el tratamiento de la obesidad severa y sus comorbilidades, y su capacidad para reducir la mortalidad en comparación con tratamientos no quirúrgicos.
· Se recomienda la cirugía a pacientes con un IMC igual o superior a 35 kg/m2, independientemente de la presencia, ausencia o gravedad de las enfermedades asociadas a la obesidad (hipertensión arterial, diabetes, colesterol, triglicéridos, apnea del sueño).
· Se recomienda la cirugía para pacientes con diabetes tipo 2 y un IMC igual o superior a 30 kg/m2.
· Se debe considerar a los pacientes con un índice de masa corporal (IMC) de 30 a 35 kg/m2 que no logren una pérdida de peso suficiente o una mejora sostenida en sus problemas de salud después de tratamientos no quirúrgicos.
Esta última indicación representa un avance significativo según las sociedades científicas, ya que permite que pacientes con obesidad menor se beneficien de la cirugía.
Para el Dr. Antonio Barranco, reconocido especialista en cirugía de la obesidad con más de 20 años de experiencia y más de 2.000 pacientes operados “La ampliación de las indicaciones de cirugía de la obesidad es una excelente noticia para aquellas personas que hasta ahora se encontraban sin una opción quirúrgica para su problema de sobrepeso, ya que no eran candidatos a cirugía de la obesidad, pero tampoco encontraban tratamientos que fuesen lo suficiente efectivos como para combatir su problema de sobrepeso a largo plazo. Sin embargo, es poco probable que este cambio se implemente en la Sanidad Pública Española, ya que aumentaría de un 13 % a un 25 % el número de pacientes con obesidad candidatos a la cirugía de obesidad. Esto implicaría duplicar las listas de espera y los recursos necesarios. Por ello, desde Obesan, nos comprometemos a ayudar al mayor número posible de pacientes con obesidad manteniendo unas condiciones económicas reducidas que hasta la fecha están siendo muy bien acogidas por muchas personas que descartaron esta opción por el coste que supone”.
De este modo, el Dr. Antonio Barranco ya ha realizado con éxito los primeros casos a personas con un IMC < 35 kg/m2 que padecían desde hace tiempo un problema de sobrepeso que afectaba a su salud y calidad de vida. Desde su consulta, tratará de solucionar el mayor número de casos de obesidad, prestando servicio a todo Sevilla.